jueves, 4 de febrero de 2010

Escaleras escamoteables.

Escaleras de dos tramos.




Escalera escamoteable de madera de pino. Caracterizada porqué el primer tramo queda siempre sujeto a la tapa, mientras que el segundo se desliza por encima del primero de modo que, al bajarlo, no ocupa prácticamente espacio por delante del cajón. Su sistema de apertura obliga a prever un espacio de maniobra en la planta superior, por detrás del cajón, necesario para poder cerrar la escalera, ya que el segundo tramo siempre es más largo que el primero.

Escaleras de tres tramos.


Escalera escamoteable de madera de pino o metálica muy funcional y económica. Formada por 3 tramos, que quedan completamente doblados encima de la tapa y no ocupan espacio, en la habitación de la planta superior, cuando la escalera permanece cerrada. Su sistema de apertura obliga a prever un espacio de maniobra por delante del cajón, necesario para abrir la escalera.

Escalera de tijera de techo.

Escalera de tijera provista de un exclusivo sistema de apertura tipo pantógrafo, muy cómodo de maniobrar, que consigue que los peldaños de la escalera queden completamente recogidos encima de la tapa, sin ocupar espacio en la habitación de la planta superior, cuando la escalera permanece cerrada. Su sistema de apertura obliga a prever un espacio de maniobra por delante del cajón, necesario para abrir la escalera.


Escalera de tijera de pared.

Escalera de especialmente diseñada para aperturas verticales. El exclusivo sistema de apertura tipo pantógrafo es muy cómodo de maniobrar y consigue que los peldaños de la escalera queden completamente recogidos encima de la tapa, sin ocupar espacio en la habitación de la planta superior, cuando la escalera permanece cerrada. Su sistema de apertura obliga a prever un espacio de maniobra por delante del cajón, necesario para abrir la escalera.

Escalera de tijera de terraza.



Escalera de tijera especialmente diseñada para salir al exterior de una construcción con techo plano. El exclusivo sistema de apertura tipo pantógrafo es muy cómodo de maniobrar y consigue que los peldaños de la escalera queden completamente recogidos encima de la tapa, sin ocupar espacio, en la planta superior, cuando la escalera permanece cerrada. Su sistema de apertura obliga a prever un espacio de maniobra por delante del cajón, necesario para abrir la escalera.

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